Juego de bloguer@s 2.0: Menestra seca, la menestra de mamá

A principios de mes, Mónica nos propuso preparar una receta con legumbres para la edición de Juego de bloguer@s de febrero. Éramos libres para escoger. ¡Qué difícil!, me gustan todas. Pero como suele suceder, pasó algo que inspiró mi elección.

Ese mismo día mi madre me preguntó si quería que nos prepararan algo especial para comer. ¡Menestra! Me apetecía la menestra que han hecho en casa de mi madre toda la vida. Una menestra seca (así la he bautizado yo), que estaba deliciosa y hacía que devoráramos las verduras. Llevaba por lo menos veinticinco años sin probarla.

Fue delicioso volver a comerla. Tras publicar la foto en Twitter…

Así que, estaba claro, los garbanzos y la menestra de mi madre iban a ser los protagonistas. Esta es una receta sencilla y muy sabrosa. Va por vosotras: Inma, Silvia, Juani y Loli.

Menestra seca, la menestra de mamá

Ingredientes: garbanzos hervidos, patatas cortadas a dados, judías verdes, alcachofas, espárragos verdes, coliflor, zanahoria a dados, huevos duros y albóndigas pequeñas (y todo lo que te apetezca)

Hacer las albóndigas. La receta es la de las Pilotetes que publiqué hace un tiempo, en Hoy cocino con mis padres.

Reservarlas en una olla tapada para que no se enfríen.

Hervir las verduras, menos las patatas y los espárragos. Deben quedar crujientes. Secar bien y a continuación freír por tandas. Escurrir muy bien e incorporar a la olla en la que están las albóndigas.

Freír las patatas y los espárragos y escurrir. Incorporar a la olla y mezclar con delicadeza todos los ingredientes.Pasar la menestra a una fuente para servir y decorar con los huevos duros. Llevar a la mesa una aceitera con aceite de oliva virgen extra, sal y pimienta, para que cada cual la condimente a su gusto.

Estas son mis compañeras de juerga cocinera este mes. En sus blogs encontraréis más recetas con legumbres.

Elvira: https://www.asisecomeengranada.com/

Carabiru: https://birulicioso.carabiru.es/

Mónica: http://www.dulcedelimon.com

Inma: http://entre3fogones.com/

Maryjose: http://tapitasypostres.blogspot.com.es/

Juego de bloguer@s 2.0: Ensalada de judías verdes con sardina ahumada

El 31 de enero del 2017 participé por última vez en Juego de bloguer@s. En esa ocasión la prota fue la pera, por lo que preparé una Quiche de peras y queso.

Sabía que volvería, pero no esperaba tardar tanto. Desde entonces, como ya sabéis todos, han pasado un montón de cosas. Pero Mónica sigue al pie del cañón- Es incansable, y el otro día me apeteció volver a participar en su(nuestro) Juego de bloguer@s.

¡Aquí estoy de nuevo! En esta ocasión la prota es… ¡la judía verde!

Esta es una receta robada y tuneada. Se la he robado a Francesc, de Ca N’Armengol. Allí comí este delicioso plato de judías, aunque con sardina ahumada en vez de anguila ahumada.

Yo no tenía tiempo para buscar anguila, así que la sustituí por la sardina. ¡También le queda de maravilla! He interpretado este plato según mis recuerdos, así que, si la lee Francesc, seguramente se llevará las manos a la cabeza 🙂 Pero la verdad es que quedó muy chula, así que… ¡ahí va mi receta!

Ensalada de judías verdes con sardina ahumada

Ingredientes: judías verdes, tomates de diferentes tipos, higos frescos verdes y morados, sardinas ahumadas en aceite (adaptar las cantidades de cada ingrediente a vuestras preferencias y necesidades)

Salsa de maceración: vinagre de sauco, aceite de oliva virgen extra, una punta de sal

Salsa para el aliño: vinagre de manzana, aceite de oliva virgen extra, miel de acacia, mostaza en grano

 

Las judías

Limpiar las judías, cortar con cortes transversales, hervir 4 minutos en agua con sal (queremos que queden crujientes), escurrir, enfriar con hielo y secar muy bien.

Pasarlas a un cuenco y aliñar con la mitad de salsa para el aliño. Mezclar con delicadeza.

El resto de los ingredientes

Pelar una parte de los tomates, cortarlos a trozos (si son grandes) o por la mitad (en mi caso fue así, ya que eran tomates pera pequeños). Ponerlos en un cuenco, cubrir con la salsa de la maceración y dejarlos en ella hasta el momento de montar la ensalada.

Cortar la sardina en trozos.

Lavar con cuidado los higos y cortarlos en cuartos.

 

La ensalada

Mezclar las judías con parte de los tomates y parte de la sardina. Pasar a un plato para servir y disponer el reto de ingredientes sobre ella. Regar con la salsa para el aliño que tenemos reservada.

Preparé esta ensalada para un encuentro muy esperado y especial. Este fue uno de los vinos que trajeron l@s invitad@s.

Aires de Garbet 2015, de Perelada (D.O. Empordà) parecía hecho para esta ensalada. Las armonías que se crearon entre los dulces y los ahumados del vino y el plato fueron una maravillosa sorpresa.

Os dejo con Una gran fábula gastronómico-política: fórmula propuesta por la Camarada Judía, un relato de Javier Tomeo que compartí no hace mucho en el blog.

Estos son mis compañer@s de juerga cocinera este mes. En sus blogs encontraréis más recetas con judías.

Elvira: https://www.asisecomeengranada.com/

Mónica: http://www.dulcedelimon.com

Inma: http://entre3fogones.com/

Maryjose: http://tapitasypostres.blogspot.com.es/

Una gran fábula gastronómico-política: fórmula propuesta por la Camarada Judía

El 2 de octubre del 2023, cerca de las doce de la noche, entraron en el restaurante Alt Heidelberg de Barcelona Gabino Diego y Javier Tomeo. Antonio me lo hizo notar. Cuando nos íbamos pasamos por su mesa, y disculpándome por molestarles les saludé. Tomeo no daba crédito de que me interesara por él y no por Gabino Diego. Tuvimos una pequeña y divertida conversación y a los dos días cumplió su promesa.

Tomeo es para mi muy especial. He pensado en compartir con vosotros algunos de los fragmentos de La rebelión de los rábanos, una gran fábula gastronómico-política.

Será una excusa perfecta para preparar algunas de sus recetas y compartir estas interpretaciones libres que voy haciendo de las recetas que nos proponen estas osadas hortalizas. Empiezo con la propuesta de la Camarada Judía Verde, pero vendrán más.

 

    Ensalada Transilvania de judías verdes

    Fórmula propuesta por la Camarada Judía

    La camarada Judía Verde empieza diciendo que nadie debe asustarse por el apelativo de la ensalada propuesta, aunque reconoce que el nombre de Transilvania, por sus connotaciones draculescas o vampíricas, puede poner los pelos de punta a más de cuatro.

    –No siempre los nombres tienen algo que ver con lo que tratan de definir o individualizar –dice, con una sonrisa tranquilizadora.

    Y sin entrar en más explicaciones enumera los ingredientes que se necesitan para preparar una ensalada Transilvania para dos personas: media taza de agua, 300 gramos de judías verdes congeladas, 50 gramos de tocino, media taza de pimiento morrón, una cebolla, un cuarto de cucharada de postre de pimienta, un pellizco de polvos de ajo, una cucharada sopera de vinagre.

    –Sólo 230 calorías por persona –puntualiza–. Y su preparación sólo cuenta quince minutos. Dos factores que, a mi juicio, deben tenerse también muy en cuenta.

    Objeción 1

    Presentada por el Camarada Ajo

    El Camarada Ajo no acepta que una ensalada que lleva el siniestro nombre de Transilvania pueda convertirse en el plato emblemático del nuevo Estado.

    –Una ensalada con semejante nombrecito –observa– daría al nuevo estado connotaciones macabras y medievales que considero incompatibles con la política de luz y taquígrafos que en estos tiempos se exige de cualquier país moderno y democrático.

    No olvidéis, además, lo mucho que mis hermanos han luchado a lo largo de los siglos contra los vampiros –añade finalmente.

    Réplica a la objeción 1

    La Camarada Judía rechaza de plano las prevenciones del Allium sativum contra Transilvania y los vampiros y dice que tiene algunas razones para suponer que el Camarada Ajo no es tan enemigo de los vampiros como pretende ser. Recuerda a continuación que todo el mundo sabe que los ajos estimulan la circulación de la sangre, impide la formación de coágulos y protegen a los hombres de accidentes cardiovasculares.

    –Eso significa que Drácula no puede sentir la menor aversión contra vosotros –añade a continuación, volviéndose hacia el Camarada Ajo, que se siente un poco desconcertado–. Algún listillo, pagado seguramente por el malvado conde, hizo correr por toda Transilvania la voz de que los ajos ahuyentan a los vampiros, para que así los campesinos los consumiesen a todas horas del día.

    –¿Y eso por qué? ¿Por qué tomarse tantas molestias? –pregunta el Camarada Ajo, a pesar de que conoce muy bien la respuesta.

    –Muy simple –responde la Camarada Judía Verde–. De ese modo, Drácula y su corte de vampiros se aseguraban de que la sangre de sus víctimas fluyese fácil y suavemente, sin coágulos, como un exquisito manantial de vida.

    –Ésa es una hermosa teoría –murmura el Camarada Tomate.

    Contrarréplica a la objeción 1

    La camarada Judía Verde dice a todos los presentes que no entiende qué interés puede tener el Camarada Ajo en desprestigiar una simple ensalada sólo por el hecho de que algún cocinero imaginativo le diese el nombre de Transilvania.

    –Y lo entiendo aún menos –prosigue– cuando la realidad es que los ajos os habéis pasado la vida sirviendo a los vampiros y facilitando sus abominables prácticas.

    Las hortalizas se sobresaltan, aunque saben que su sangre, que es de color verde, no interesa lo más mínimo al Príncipe de las Tinieblas. Se estremece, sobre todo, el Camarada Apio, la vez la más delicada de las verduras presentes.

    –No, no, no puedo entender el doble juego y la hipocresía de algunos –suspira la Camarada Judía.

 

Interpretación libre de la receta de la Camarada Judía

Como podéis ver, he variado algunos de los ingredientes: 300 gramos de judías verdes frescas y hervidas 10 minutos, 50 gramos de tocino ahumado, media taza de pimiento rojo asado al horno, una cebolla, unos golpes de molinillo de pimienta negra, dos ajos, una cucharada sopera de vinagre de manzana.

Nosotros la tomamos caliente, pero templada seguro que también está muy buena. ¡Que la disfrutéis!

Viaje a Tailandia con Birrabox

El 9 de octubre tuve un nuevo seguidor en Twitter, Birrabox. Le di la bienvenida, cotilleé por su web y, ¡me encantó! Así que decidí presentarlos personalmente.

Birrabox es una tienda online de cervezas que además hace una selección mensual de cervezas, a un precio más que razonable. Enseguida se pusieron en contacto conmigo y me ofrecieron la posibilidad de probar su selección del mes de octubre. Como podéis imaginar, dije que sí. Me encantó la propuesta de probar tres cervezas diferentes; cada una sería un viaje a algún lugar exótico, la excusa perfecta para planear menús y trabajar los maridajes con cervezas. A los pocos días, recibí su selección.

Las tres propuestas me parecieron muy interesantes, pero me conquistó la idea de una cena tailandesa, así que decidí empezar por Singha, una cerveza tailandesa tipo lager que elabora Boon Rawd Brewery.

Mi viaje gastronómico, como casi siempre, empezó entre las páginas de un libro. Esta vez fue El libro esencial de la cocina asiática, de la editorial Könemann.

Este es el menú que escogí para Singha:

  • Ensalada de pepino con cacahuetes y guindilla
  • Pastelitos de pescado al estilo tailandés

¡Seguro que os va a encantar! ¿Quién se anima a una noche exótica, llena de aromas delicados y sabores sorprendentes?

Ensalada de pepino con cacahuetes y guindilla

Ingredientes

Para 4-6 personas

  • 3 pepinos
  • 2 cucharadas de vinagre blanco
  • 2 cucharaditas de azúcar
  • 1-2 cucharadas de salsa de guindillas
  • ½ cebolla roja piada
  • ½ taza (15 g) de hojas de cilantro fresco
  • 1 taza (160 g) de cacahuetes tostados
  • 2 cucharadas de ajo frito
  • ½ cucharadita de guindilla picada
  • 1 cucharada de salsa de pescado

Preparación

Pelar los pepinos y cortar por la mitad, a lo largo. Despepitarlos y cortarlos en rodajas finas.

Mezclar en un cuenco pequeño el vinagre y el azúcar, y remover hasta que el azúcar se haya disuelto. Trasladarlo a un cuenco grande y mezclar con el pepino, la salsa de guindillas, la cebolla y el cilantro. Dejarlo en adobo 45 minutos.

Pasado este tiempo, freír el ajo y escurrir muy bien.

Justo antes de servir, agregar los cacahuetes, el ajo, la guindilla y la salsa de pescado. Mezclar con delicadeza y servir.

Pastelitos de pescado al estilo tailandés

Ingredientes

Para 4-6 personas

  • 450 g de filetes de pescado blanco
  • 3 cucharadas de fécula de maíz o de harina de arroz
  • 1 cucharada de salsa de pescado
  • 1 huevo batido
  • ½ taza (15 g) de hojas de cilantro fresco
  • 3 cucharaditas de curry rojo fresco o precocinado
  • 1-2 cucharaditas de guindilla roja picada
  • 100 g de judías verdes cortadas finas
  • 2 cebolletas picadas finas
  • ½ taza (125 ml) de aceite
  • salsa tailandesa (ver receta más abajo)

Preparación

Triturar o picar con el cuchillo el pescado hasta que quede fino. Agregar la fécula de maíz, la salsa de pescado, el huevo, el cilantro, la pasta de curry y la guindilla y mezclar muy bien.

Trasladar la mezcla a un cuenco grande, añadir las judías y la cebolleta y mezclar bien. Hacer pastelillos planos.

Calentar a fuego medio el aceite. Freír los pastelillos de 4 en 4 hasta que adquieran un tono dorado oscuro por ambos lados. Escurrir sobre papel de cocina y servir inmediatamente.

Servir junto con la salsa tailandesa.

 

Si lo prefieres, puedes hacerlos a la plancha. Puedes preparar los pastelitos con antelación y guardarlos, cubiertos con film, no más de 4 horas en la nevera.

 

Salsa tailandesa

En una cacerola pequeña mezclar ½ taza (125 g) de azúcar, ½ taza (125 ml) de agua, ¼ taza (60 ml) de vinagre blanco, 1 cucharada de salsa de pescado y 1 guindilla pequeña roja picada. Llevar a ebullición y hervir, a fuego lento, sin tapar, 5 minutos, hasta que espese ligeramente.

Retirar del fuego y dejar enfriar un poco antes de mezclar con ¼ pepino picado pequeño y fino, ¼ zanahoria picada pequeña y fina y 1 cucharada de cacahuetes tostados gruesamente picados.

Ya sabéis, si os ha gustado la propuesta del mes de octubre, seguro que os gustarán las que tienen que venir. Es una buena forma de dejarse aconsejar y de probar cervezas de todo el mundo. Daros un paseo por Birrabox y ya me contaréis.

Os anuncio que aún tengo pendientes dos viajes gastronómicos más, uno por Alemania, con Dinkelacker Privat, y otro por Grecia, con Fix Dark. Pronto llegarán estos maridajes, mientras, disfrutad de buenas compañías, mesas y cervezas.