Hay días especiales, y sin duda el que pasamos en Can Marlès lo fue. Can Marlès es una bodega de producción ecológica en el corazón del parque natural del Montmell (Baix Penedès). Nada más llegar a la bodega el paisaje te impacta sobremanera. Estar rodeada de montañas y de viñas nunca deja indiferente al cuerpo y al alma. Realmente está ubicada en un lugar privilegiado.
Nos recibe Lucía, directora de marketing y promoción de Can Marlès. Y de inmediato aparece Miguel, el propietario, que nos acompañará durante toda la jornada.
La Masía de Can Marlès, a pocos metros de la bodega, es una verdadera joya, que ha sido restaurada con gusto y un gran respeto por el entorno y la arquitectura original.
Allí nos espera un cóctel de bienvenida con Vermut Miró y Vermouth Padró & CO. Lucía nos habla de la historia del municipio del Montmell y de Can Marlès.
En Can Marlès tienen el proyecto de convertirse en un gran centro de turismo rural, con el vino como elemento principal, y apuestan por los productores de cercanía. Es por eso que pudimos conocer el trabajo de algunos pequeños productores. Probamos las delicosas mermeladas que hacen Imma y Esther, Les Filos, y también el aceite Torclum, de Jordi.
También conocimos, tengo que confesaros que me parecen preciosas, las servilletas de MYdrap, unas servilletas de algodón en rollo, precortadas y lavables, fabricadas en alegres colores. Para esta ocasión escogieron los colores del otoño y la viña.
Una vez repuestos del viaje iniciamos un paseo por las viñas, que acabó en Cal Puig. En la actualidad en Can Marlés ya hay una pequeña casa rural, con dos habitaciones y todo tipo de comodidades. Ahora inician un bonito y ambicioso proyecto, el de rehabilitar el resto de masías (seis en total), convertir una de ellas en hotel rural y el resto en casas rurales unifamiliares. Y han empezado por Cal Puig. Marc Andreu, el arquitecto, nos explica el proyecto.
Llega la hora de visitar la bodega y probar sus vinos. En esta bodega, situada a 500 metros de altitud, se producen tres vinos: Chardonnay, Ull de Llebre (Tempranillo) y un vino blanco elaborado con Sauvignon Blanc. Los tres pertenecen a la D.O. Penedès. Pepa Menchón, la enóloga, guía la cata.
Ya se ha hecho de noche.
Unas horas antes, nada más llegar a Can Marlès, me he colado en la cocina, para ver qué nos estaba preparando Sergi.
A estas alturas de la noche solo pienso en las delicias que nos ha preparado. Lucía y Sergi han dedicado mucho tiempo y mucha ilusión en la planificación de este menú. Menja’t el Montmell (Cómete el Montmell) es, como habéis visto, una orgía de colores y sabores, un menú elaborado con productos de la zona, un canto al Montmell.
Tras la cena, una velada lírica inolvidable, dirigida por el crítico musical Jordi Madaleno, con la voz de Carles Pachón y Josep Buforn al piano, que interpretan piezas de G. Rossini, W.A. Mozart, V. Bellini, G. Bizet y A. Thomas. Un maravilloso final para una jornada inolvidable.
Miguel y Lucía, dos grandes anfitriones, nos han contagiado a todos su ilusión por este proyecto. Estoy deseando ver cómo poco a poco se hace realidad. Si queréis descubrir el Montmell, sin duda en Can Marlès lo podréis hacer, rodeados de personas llenas de pasión e ilusión. Can Marlès es un lugar para alejarse del ajetreo, descansar y disfrutar, por unos días, de la naturaleza y de paz.
Todo precioso. Te han quedado chulisimas las fotos. Un beso
¡Muchas gracias, Maite! Fue un día precioso, lleno de todo tipo de delicias, un festín para los cinco sentidos 🙂 Un beso
Madre mía ¡qué sitiazo y qué menús tan llenos de delicias! Una experiencia enriquecedora me puedo imaginar. Muchas gracias por compartirla.
¡Un beso Rosamary!
¡Muchas gracias! La verdad es que fue un día inolvidable. Hay personas y proyectos especiales, y si nosotros no hablamos de ellos, nadie lo hace. Eso es lo que hace que día tras día, a pesar de lo ajetreada de nuestras vidas, podamos encontrar tiempo para compartir esas cosas. Y claro, saber que siempre estáis ahí 🙂
¡Cómo me gusta tenerte siempre por aquí! :-)) Un beso
Quin dia més xulo que vareu passar, petons!!!!!!!!!!!
Sí!!! Un petó! 🙂
Hermoso post… este año estuve en Mendoza (Argentina)… visité varias bodegas, incluidas la de champagnes Chandon (fue mi favorita!) .. Excelente experiencia!… me encantó el post!. Un abrazo y lo mejor en 2017! 😀
¡Igualmente preciosa! Un abrazo muy fuerte 🙂